Misa seguía avanzando por el bosque siguiendo aquella voz, de repente entre la maleza apareció una luz, y al mismo tiempo el dije empezó a brillar un poco más, Misa ya no podía aguantar la curiosidad tenia que saber de quien era esa voz tan cálida y reconfortante, casi corriendo entre arbustos y ramas llego a un pequeño claro y quedo anonadada con la imagen que se le presentaba a sus ojos.
Un marco de unos dos metros completamente blanco y cuyas columnas eran idénticas a troncos de arboles, se presentaba ante ella, ademas este brillaba con una luz blanca como no había visto jamas, en completo silencio no daba crédito a lo que sus ojos veían realmente la locura se había apoderado de ella.
- Bienvenida a mi mundo, Misa-chan. - Esta vez la voz que provenía del marco se escucho muy claramente, no podía creérselo, ni siquiera podía salir corriendo de la impresión, si es que era una alucinación era bastante real, lo siguiente que se vio fue que el mismo cuerpo de Misa estaba destellando luz, e inmediatamente salio un haz de luz que se dirigió al marco e iba desapareciendo conforme entraba a una capa invisible, como una superficie liquida se fueron formando ondas entorno a el haz de luz que entraba en el marco, Misa seguía inmóvil tras todo esto.
De repente se escucharon las ramas justo en la espalda de Misa, - Oye, Misa, ¿estas molesta? -. Era Rin quien preguntaba con algo de inseguridad, Misa no le dirigía la palabra, Rin bajo la cabeza, y un poco triste le siguió hablando a Misa, - Si lo estas lo siento por arruinar el momento. - Rin de nuevo espero una respuesta de Misa la cual parecía fría como el hielo sin siquiera voltear a mirarla, Rin se sintió aun peor que antes, pero prosiguió, - Por favor Misa vuelve con nosotros, no sabes cuanto lo siento, te prometo no molestar de nuevo a Io, así que por favor. -.
El cuerpo de Misa reacciono moviéndose levemente, ante esto Rin dejo ver una pequeña sonrisa, sin embargo esta no duro demasiado, al ver como su mejor amiga golpeaba el suelo con su cuerpo sin siquiera protegerse el rostro, ante este evento lo único que pudo hacer Rin inmediatamente fue correr hacia el cuerpo que yacía en el suelo mientras gritaba su nombre - ¡¡¡MISA!!! -, el pánico casi se apodero de Rin, sin embargo trato de pensar un momento, enseguida volteo y empezó a examinar a Misa para ver en que estado se encontraba, - Lo encontré.- Misa tenia pulso y su respiración se veía normal, pero no sabia porque estaba inconsciente. - Misa que tienes, por favor contéstame, Misa, ¡Misa!. -. Dijo esto tomando a Misa entre sus brazos, agitándola levemente e incluso golpeando suavemente su rostro, Rin intento despertarla en vano, - ¡¡¡IO, HINA, AYUDENME!!! -. grito con toda su alma, su mente racional estaba encontrando su limite al ver que las posibles soluciones no ayudaban, estaba entrando en la desesperación, pensando solamente que lo mas importante en este momento era esperar a sus amigos y llevar a Misa al hospital.
Fin del Capitulo
Capitulo 2 mas tarde.
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