Misa, Capitulo 1.12

Mientras tanto, Misa ya se encontraba dentro de las instalaciones de la universidad, se sabia fácilmente debido al ruido que generaban sus zancadas a través de los pasillos silenciosos con uno que otro estudiante, Misa ni siquiera de daba cuenta de la soledad de la universidad, solo pensaba en llegar a su salón para asistir a clase, entre mas se acercaba a su objetivo una expresión de alegría se dibujaba en su rostro. - Ya me falta poco. -. Ya con la practica que venia de la escuela y otras llegadas tarde en las que había puesto a prueba todo su potencial físico, ahora iba bajando su ritmo, tranquilizando su respiración para evitar entrar al aula de clases jadeando, mientras hacia todo esto, por fin había llegado a su destino.

- Buenos días, - dijo Misa mientras deslizaba la puerta de entrada a su  clase. - Lamento llegar tan t. . . -. Misa paro de una manera inmediata cuando abrió y se dio cuenta que no había nadie en el salón, era sencillamente imposible, la clase de esa hora era esencial para el conocimiento del cuerpo humano, una clase a la cual nadie faltaba, todas estas dudas asaltaban a Misa mientras reinaba la confusión en su mente y se reflejaba en los gestos de su rostro, dando leves pasos para alejarse un poco e intentar comprobar si era una ilusión, Io llegaba detrás de ella.

<< Ah creo que si lo fue. >> Refiriéndose a lo distraída que Misa era. Aun no podía creerse que no se diera cuenta que había permiso el día de hoy, la miraba como quien mira a un perrito confundido, tanto con lastima, como con algo de decepción, de repente recordó algo.

- Ah si, oye Hina me dijo que nos encontraríamos a las 2 en el centro, me dijo que te avisara si te veía ya que no le habías contestado a Rin. -. Dijo Io tranquilamente.

- Ah ¿Io-san?- Dijo Misa mirando atrás de ella, borrando toda expresión de confusión, esos cambios eran únicos de Misa, por ese lado era bastante rara, un momento podía estar llorando y en la mas profunda tristeza y medio segundo después estaba alegre y riendo a carcajadas, era sorprendente sus cambios de humor.

- Eso quiere decir, que tenemos permiso.- Otro de esos impredecibles cambios de expresión, sonde se reflejo una profunda alegría y una sonrisa inigualable, ademas pareciese que un brillo esperanzador saliera de sus ojos, parecía una niña, sin embargo Io solo podía pensar en lo distraída que era y solo pudo pensar << Hasta ahora te das cuenta. >>.

Después de eso cada uno de ellos volvió a su casa, y cuando dieron casi las 2, Io y Misa se encontraron de nuevo en su camino al centro, no hablaban mucho solamente cosas concernientes a sus amigas, pocas cosas personales, aunque para cualquiera hubiera parecido una pareja en su día libre.

- ¡Nii-san, Misa, por aquí! -. Dijo Hina llamando la atención de la pareja, ellos a su vez se acercaron.

- Hola chicas. - Dijo Misa alegremente saludando a Hina y a Rin que ya se encontraban en el lugar.

- Ehh, no se ven nada mal juntos. -. Dijo Rin en tono bromista debido a que en realidad parecían una pareja saliendo. - Sí, si, lo que digas,- dijo Io en tono despectivo, e ignorando completamente las palabras. - ¿Ahora donde vamos ahora? - Dijo Io cambiando de tono, mientras todos se preguntaban que había planeado Rin en esta ocasión, ya que siempre arreglaba las salidas en grupo. . . Continuara.