lunes, 16 de septiembre de 2013

Reglas del Juego, Capítulo 3.8


Volviendo de nuevo al palacio Shao y Misa seguían en silencio, Misa con una mirada triste y Shao con sus ojos cerrados, tal vez pensando en lo siguiente que debería decir. El silencio incomodo duro algunos segundos, después te eso Shao volvió a mover sus labios.
- Sabes cuando un alma tiene la corrompe el Yokubo esta detiene su ciclo natural, puede que algunos de sus deseos puedan ser cumplidos en este mundo, pero actualmente la mayoría de ellos se cumplen en tu mundo y al igual que tu ellos saben que la única forma de regresar es al igual que tu atravesando la puerta que esta junto a nosotras. Es por eso que tenemos tantas defensas alrededor de este palacio como podrás haberte dado cuenta, si alguno llegase a cruzar a través de ella puede causar grandes problemas tanto para tu mundo como para este, lo sabemos por que tenemos registros de algunos de ellos, desde que estoy aquí nuestras defensas han sido diezmadas dos veces, en las cuales entraron varios de ellos pero conseguimos controlar la situación. -.
Shao abrió los ojos nuevamente. - Por ello no podemos quedarnos sin hacer nada como acabaste de sugerirlo tenemos que mantener el orden y proteger tanto a tu mundo como a este de los Kurai (Oscuro). -.

- ¿Kurai?, esa palabra la dijo Yumi antes cuando veníamos aquí. - Dijo Misa mientras intentaba comprender la situación. - ¿Esa es la palabra que usan para referirse a las almas dominadas por el Yokubo? -. Pregunto Misa volviendo a mirar a la tranquila Shao.
- Muy bien Misa-chan me ahorraste parte de la explicación. -. Dijo Shao mientras sonreía.
- Entonces me llamaron para que los ayude a combatir a los Kurai, ¿para eso necesitan mi ayuda?-. Misa hablaba mientras pensaba en que ella especialmente no tenia ninguna habilidad de pelea, ni siquiera había iniciado una pelea en su vida, no entendía el por que había sido elegida para esta labor.
- Es para eso, parcialmente. -. Respondió Shao dudando un poco de sus palabras, a lo cual Misa presto atención, tal vez Shao le revelaría algo que diese sentido a todo esto.

- Veras la necesidad de traerte fue un caso bastante especial para el cual no teníamos ningún precedente, de hecho lo meditamos y reconsideramos bastante tiempo, tratando de no interrumpir tu vida, sin embargo se nos acabo el tiempo limite que creo que teníamos, así que decidimos recurrir a ti como ultima opción. -. Misa escuchaba atentamente mientras Shao con una seriedad total la miraba. - Veras no sabemos como pero nuestro mundo esta siendo tensado de alguna forma, en algunas zonas se han visto sucesos que no sucedían hace mucho tiempo, la actividad de los Kurai a aumentado considerable mente, sentimos una sensación de peligro inminente, por ello te dije de la posibilidad de morir en este mundo, sin embargo somos muy pocos y me temo que si no recibimos toda la ayuda posible no lograremos salir de esta y recuperar el control como lo hicimos antes. -. Decía Shao con algo de tristeza en su tono de voz. - Si. . . -.
- Y eso que. -. Interrumpió Misa antes de que Shao continuara con su discurso. - Shao-san, yo ya decidí ayudarlos, simplemente ya no puedo echarme para atrás no importa lo que tenga que hacer. -. Creyendo que tal vez necesitaban otro tipo de ayuda, a parte de combatir y en ese caso si serviría para algo.
- Je, que raro parece que ya estuviera hablando con toda una guardiana. -. Ante esta afirmación de Shao, Misa hizo un gesto extraño, - ¿Guardiana? -. Pregunto Misa de inmediato.
- Ah cierto no te he contado de esa parte. -. Dijo Shao dedicando una sonrisa a Misa mientras pensaba como explicarlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario