Ya formada Kio en medio del salto se dispuso a cortar la bola de energía.
- Debes haberlo deducido, pero no me harás daño con esto, si eres tan idiota de hacerlo entonces ven. -. Poniendo su escudo en frente de la bola de energía, aun así Kio no se detuvo, inclusive la bola se hizo mas grande, finalmente frenando fuertemente corto la bola.
<< Que fue eso, de nuevo esta extraña sensación. >>. Shao se resintió nuevamente y no supo por que razón, pero sospechaba que era la energía de Kio la que la hacia sentir tan insegura.
La energía de nuevo se empezó a reflejar en el escudo, esta vez fue tanta que el escudo dejaba pasar algunos rayos en sus extremos no podía absorberla toda, el Kurai blanco se sorprendió por la cantidad pero aun así entre mayor fuera la energía absorbida mayor seria el impacto que recibiría el chico, por que rayos lo había hecho. La energía de nuevo empezó a arremolinarse entre Kio quien había dado un pequeño salto quedando casi en posición horizontal junto con su espada que sostenía firmemente.
La explosión se dio en unas centésimas de segundo, siendo mucho mas violenta que la anterior, levantando otra nube de polvo que cegó completamente al Kurai blanco, mientras que Kio salio disparado rumbo al Kurai obeso con la punta de su espada, que ahora se cubría con una ligera capa de energía, apuntándole directo a el estomago.
- A. . . yu. . . denme, ¡AYÚDENME NO PUEDO MOVERME! -. Grito el Kurai obeso desesperado viendo como Kio se acercaba a gran velocidad e intentando torpemente escapar del agujero que el mismo había cavado, nada pudo hacer cuando la espada desplazo la carne de su camino a atravesándolo completamente junto con Kio, a pesar de lo grave que se veía el daño la sangre que se vio solo fue un estallido, después de pasar al sujeto gordo ella dejo de fluir, sin embargo Kio no había acabado freno bruscamente con sus piernas, flexionándolas al máximo, justo en ese momento la nube de polvo cubrió a Kio ocultando sus acciones, sin embargo esta se disipaba rápidamente. - Tsk, maldito polvo, que esta pasando. -. El Kurai blanco se altero con el grito de su compañero, e intentaba apartar el polvo de su rango de visión.
Mientras tanto en los arboles del bosque, el Kurai femenino se recuperaba, tan rápidamente que ya estaba recuperando el conocimiento. << ¿Q. . . que, que paso, acaso un ataque pero esta fuerza no la he sentido nunca, quien demonios es este chico. . . ¡Eh no no es posible que sea! >>. Meditando un momento se le vino de golpe un recuerdo lejano, la historia de un tipo de personas bastante poderosas, poco mas que un rumor sin embargo eran personas temidas, se dice que solo los Kurais que aun no se habían transformado podían darles la talla.
Acaso el rumor era cierto y estaban peleando con una de esas temidas personas a las que llamaban en los poblados "guardianes".
De repente el campo de batalla le llamo la atención a la Kurai, de nuevo estaba lleno de polvo, alcanzo a divisar a su compañero de escudo observando en todas direcciones, por que estaba tan impaciente, de pronto la silueta del posible guardián se levanto encima de la nube de polvo.
- ¡CUIDADO ARRIBA! -. Grito la Kurai alertando a su compañero quien solo siguió la voz bífida de la Kurai. - ¡ARRIBA DE TI, IDIOTA! -. Remarcando aun con mas desesperación, por fin hizo entender al Kurai de escudo de donde provenía el ataque.
Kio ya venia con todo abanicando su espada, el Kurai blanco apenas pudo reaccionar ante esta sorpresa, interponiendo el escudo entre el y Kio, el guardián lanzado al ataque estaba dispuesto a destrozar de una vez ese molesto escudo, pensó hacerlo con la espada pero probablemente mataría a ese Kurai especial, rápidamente pensó en los diversos escudos reflectores que enfrento alguna vez, recordando que la mayoría de ellos eran algo frágiles este no debería ser la excepción, así que tensiono los músculos de su pierna izquierda y se preparo para el impacto. . . Continuara.
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