Maestro, Capítulo 4.11

|| Kio estaba corriendo de una manera desesperada por aquellos pasillos indistinguibles del palacio, estaba perdiéndose en el sitio donde había estado tanto tiempo, era casi inimaginable, corría mientras buscaba a algo o a alguien.

- GRAAAAAAAAGGG, AHHHHHHHH. -. Un grito desgarrador provino de todas direcciones, Kio tuvo un terrible presentimiento, lo único que pudo hacer fue seguir corriendo, estaba exhausto, ni siquiera pasaba por su mente la manera por la cual seguía corriendo, ni la energía que utilizaba para ello. 
De repente vio un destello negro salir del siguiente pasillo, Kio sintió que su objetivo estaba al girar la esquina, al llegar vio a Christin siendo consumida por las sombras, el joven no lo pensó para zambullirse en aquella oscuridad para auxiliar a su compañera, sin embargo por mas que corría la chica de cabello rubio se alejaba cada vez mas y mas, pero se podía ver como Christin movía sus labios repitiendo dos palabras como si su vida dependiese de ello.
- ¡Lo haré, lo haré, pero no te vayas! -. Gritando como ultima opción,. casi como un ruego, pero después de decir eso, Kio sintió un fuerte impacto en su nuca, el sonido del llanto de una mujer invadió el lugar, Kio hizo un ultimo esfuerzo intentando alcanzar a Christin con sus manos mientras perdía el conocimiento. ||

Kio despertó de golpe, quedo sentado en su cama, calmo su respiración, se mando la mano al rostro y volvió a acomodarse en su lecho, de repente pasos se oyeron afuera de la habitación, alguien golpeo su puerta y la abrió, una silueta se recostó contra el marco de la puerta mientras observaba a Kio en su cama  rodeado por una luz tenue.

- Ya no recuerdas a los amigos eh, pensé que pasarías por mi torre a saludar. -. Zio quien estaba en la puerta reprocho el comportamiento de su amigo, Kio sin embargo hizo caso omiso e intento acomodarse nuevamente.

- Solo vine de paso en seguida me iré, simplemente fue eso, no tenia tiempo. -. Respondió Kio con algo de molestia con su tono de voz.
- Ja, eso seria poco coherente si tengo en cuenta que pasaste mas de una hora esperando allí afuera, justo al anochecer esperando a que te dejara entrar. -. Zio mientras entraba a la habitación diciendo esas palabras observaba el rostro de Kio con los ojos cerrados.
Kio abrió un ojo para espiar las acciones de Kio cuando lo vio justo en frente de si, se re-acomodo y dio un bufido.

 - Solo vine por que Shao-sama me pidió un favor y justo hace un momento lo resolví, solo descansare un poco y me iré en la madrugada. -. Zio noto un tono bastante molesto en Kio, tal vez era algo obvio y estúpido preguntarlo, pero quería saber la razón de su enojo.
- ¿Pareces algo molesto, acaso Shao-sama reprendió tu comportamiento? Después de todo estuviste mas de un año por fuera, o quizás. . . -. Zio solo daba teorías de las posibles molestias de Kio, una detrás de otra y a su vez la siguiente mas absurda que la anterior, Kio empezaba a perder la paciencia.

- ¡Siempre me molesto cuando pierdo mi tiempo sin sentido! -. Solo pudo decir esto en voz alta deteniendo el cotorreo de Zio, el silencio se apodero un momento de la habitación.
- Je, no has cambiado en lo absoluto, sabes, se que podría ponerte de buen humor. -. Después de decir esto Kio observo fijamente a Zio, bastante atento, después de todo los momentos que pasaba probando los artilugios de Zio, cuando era mas joven, eran bastante entretenidos, aunque se tornaran algo peligrosos entre mas crecía, Zio podía ser bastante rudo a veces, terminando en agresión física para Zio si algo salia mal
. . . Continuara.